Contador de visitas

...tal como han hecho desde tiempos inmemoriales los jóvenes sometidos a presión, decidieron tumbarse un rato y perder el tiempo.

miércoles, julio 27, 2005

escaleras arriba/escaleras abajo

Escaleras arriba:
  • Algunos días nublados en verano.
  • Una web para los que estamos en las nubes: aquí. Y otra para mirar, signos y avisos que están en la calle: swanksigns.
  • Los cines de verano.
  • Una recomendación para recuperar en dvd: Election, de Alexander Payne. Talento poco publicitado.
  • Que casi nada te de igual.
  • De momento, la película que está rodando Spielberg sobre lo que pasó en los JJOO de Munich de 1972. A ver.
  • Mañana con El País, Flash Gordon; el viernes, Hellboy.
  • Conocer (o intuir) gente interesante si se dejan.
  • Hacer propósitos de verano.


Escaleras abajo:
  • Esta web. Si podéis emplear cinco minutos ( o tres), pinchad en Christina Ricci (parecido inexistente), Pe Cruz (mutando) y Esther Cañadas (directamente trash, como ella misma, vamos).
  • Tener sueño después de dormir.
  • Secuelas innecesarias -como Herbie: A tope- que llevan dentro actrices innecesarias como Lindsay Lohan.
  • Que estén preparando una versión cinematográfica, mezcla de animación y acción real, de Emily The Strange. No me fío.
  • Lo mal que se estrenan los documentales en este país (o lo que sea).
  • Tener que esperar diez días hábiles para que te den los resultados de unos análisis. Y mientras, estoy a merced de lo que sea. Que no va a ser malaria, pero...
  • Faltas de ortografía, comas que cambian el sentido de las frases, errores sintácticos, nombres mal escritos... Lugar: medios de comunicación en general (informativos y desinformativos también).
Canción de mi día de hoy: "Dance me in", Sons and Daughters.


Añado (28/07, 9:45): Dentro de unas horas estaré (mos) en otro sitio, Alburquerque. El evento: Contempopranea. El plan: no hacer nada que no nos apetezca. La rueda de prensa: a la vuelta. La vuelta: el domingo.

martes, julio 26, 2005

heavenly

Ayer en la playa nos dio tiempo de inventarnos a Hormigo y Ortigo (que son primos y tienen una historia aunque todavía no tienen cuerpo ni cara) y a Rona la Ladrona (que no tiene familia de momento, aunque más o menos ya tiene cara y cuerpo). Y nos dio tiempo de reirnos compulsivamente.
Y G. dice: - Tenemos que parar.
Y yo digo: - ¿Por qué?
- Porque vamos a perder la cabeza, y acabaremos como las de Criaturas celestiales, y lo mismo un día nos da por matar a alguien.
- No creo.
Y me quedé pensando en la película, en que es una de mis favoritas por muchas razones. Y luego pensé en la historia real, y en que Juliet es escritora de novelas de misterio, y Pauline trabaja en una escuela en la que enseñan a niños a montar a caballo. Me acordé de que las sentencias de ambas incluían la prohibición de volver a verse, aunque se escribieron cartas durante algún tiempo. Me pregunto cómo recordaran todo aquello. Y si habrán vuelto a escuchar canciones de Mario Lanza.
Hace un rato, escucho música en la tele y le pregunto a G. desde la puerta:
- ¿Qué estás viendo?
- Nada, una película de Mario Lanza en TCM.

Uy.

Canción de mi día de hoy: "Sólo tienes lo que das", La buena vida.

lunes, julio 25, 2005

interioridades y personal training

Estaba pensando en si mi forma de relacionarme con lo que me rodea es contradictoria, y claro, lo que pasa es yo soy contradictoria. Aunque a veces me da la impresión de que esas dualidades son complementarias, y necesarias en cierto modo. Y éstas cuatro líneas son una versión pobre y extractada de eso que estaba pensando.


Courtney Love tiene entrenadora personal para adelgazar. Es Pamela Anderson. Si el grunge levantara la cabeza... O no.


Canción de mi día de hoy: "Visita", Nosoträsh.

sábado, julio 23, 2005

townsville

Ayer fuimos a un concierto de El Bicho (gratis, cuidado), cortesía del ayuntamiento de mi pueblo (que siempre será pueblo aunque ya tenga bastante más de 50.000 habitantes y se llame ciudad). Sobre el evento musical: Era en el paseo marítimo (a favor), si girabas la cabeza veías la luna (a favor), algunas partes instrumentales parecían de Jesucristo Superstar (a favor, sí), la trompeta (a favor), los comentarios entre canción y canción o during una canción (en contra), mucha gente (en contra), tanta fusión (en contra), las coreografías de algunas bailarinas del público (en contra), abundancia de camisetas sin mangas entre ellos (en contra, basta ya) y maquillajes ultraterracota entre ellas (en contra, ¿para qué están todo el día en la playa?). El resto de reflexiones veraniegas me las ahorro aquí.

Esta mañana hemos ido a un vivero, que es uno de mis sitios favoritos a los que ir, y vuelto con dos cajas llenas de plantas (es una afición con éxito en la familia). Cosas pequeñas, dicen.

Esta tarde he estado haciendo bricomanía para mi madre con un martillo y un cincel. Es el tipo de trabjo que me gusta, hay que tener paciencia y te concentras mucho. Además, cuando consigo desarrollar cierta técnica, me siento parte de la cadena evolutiva.


Canción de mi día de hoy: "Rollercoaster", Everything But The Girl.

viernes, julio 22, 2005

respeten el orden de llegada

Podría escribir sobre el calor que hace, sobre por qué hay gente que hace viajes y está de mal humor, o sobre lo igual que me da que ayer me llamaran para entregar una memoria que yo no sabía que tenía que entregar, sobre que por eso mismo de la memoria estoy aquí haciendo otras cosas con el Word abierto, sobre Persépolis - que me ha gustado mucho más de lo que esperaba, y hoy la segunda entrega con El País-, sobre los estilismos (algunos imposibles y otros directamente malvados) del programa cantarín (que lo veo, sí), sobre fotos que he hecho y muñequitos que voy a pintar, sobre que me quedé sin grabar unos cedés que tengo muchas ganas de escuchar porque mi ordenador se colgaba... pero en realidad lo que quería contar es que ayer salvé un cangrejo de morir por insolación.
Canción de mi día de hoy: "Time running", Tegan & Sara.

miércoles, julio 20, 2005

escaleras arriba/escaleras abajo

Escaleras arriba:
  • El momento (generalmente efímero y por ello más apreciado) en el que no tienes nada pendiente.
  • Nip/Tuck. Una serie sobre cirugía estética y desechos internos. Los personajes no son de los que caen bien, es cínica, decadente... Y muy buena. En Calle 13 y algunas autonómicas.
  • Libros como éste o éste.
  • Comprar dos faldas y un pantalón por 30 euros. Lugar del milagro: H&M. Sensación: victoriosa.
  • Que Howl's Moving Castle esté haciendo una taquilla más que aceptable en EEUU.
  • Esta iniciativa: The big idea.
  • Sympathy for Lady Vengeance, de Park Chan-wook. La última de su trilogía sobre la venganza. El trailer aquí. Sólo por el título ya me gusta.
  • Play Station portátil.
  • Los blogs que cuentan cosas. Que parece una obviedad pero no lo es.

Escaleras abajo:
  • Barbacoas descerebradas en el monte. Que no exista la convicción generalizada de que es un delito grave. Y lo fácil que es hacer pedagogía a partir de hechos pasados.
  • Ruidos. Parece que en verano el ser humano no tiene la necesidad de dormir.
  • Modelitos veraniegos. Y sigue...
  • No poder comprar un ordenador nuevo hasta septiembre. Mientras, reinicio, y reinicio...
  • Que intenten vendernos sex-symbols como éste. Si es igual que un personaje de Érase una vez el hombre... Pobre mercado musical. Y pobres teenagers. Aunque pensándolo bien, se lo tienen merecido (el mercado y las teenagers).
  • Ir a la playa los domingos.
  • Ahorrar.

Canción de mi día de hoy: "Be gentle with me", The Boy Least Likely To. Recomendación: buscadla y lo que sigue. Descubierto vía escalextric.

lunes, julio 18, 2005

extracciones

Mañana tengo que madrugar y presentarme en ayunas a las 8:15 horas en el centro de salud (dicen) para dejar que me saquen sangre. Miro el papelito que me dieron con la hora para no ir en vano y veo que pone "extracciones/metadona", así que seguro que el trámite me va a proporcionar momentos inolvidables.


Tardo cuatro días en hacer un trámite teléfonico con la compañía de la luz. Las cosas funcionan así, tanto, que cuando por fin todo se soluciona en tres minutos (momento mágico) hasta les doy las gracias. Y al final voy a preferir la teleatención a la ventanillaatención.


Ayer hacíamos lo que se hace con el mando a distancia y el dedo se paró un momento en Documentos TV.
Era un reportaje sobre las falsificaciones de marcas conocidas que se hacen en China. Se veía un gran centro comercial con muchas luces, carteles, escaleras mecánicas, colores y a la vez un aire a mercado. Quiero ir a China. En el centro comercial (que tenía un nombre específico como lugar de venta de aproximaciones a la realidad de las marcas) trabajaban como dependientes personas que sólo tenían un sueldo mínimo, el resto de las ganancias era para el dueño. Todo muy justo.
Allí se presentaban unos franceses estirados, sabuesos de Cartier, que eran como superhéroes contra el pirata pero en antipático. Se hacían pasar por clientes, conseguían que las dependientas los llevaran al almacén y les vendieran un bolso con el logo de su marca... Y aparecía la policía. Las dependientas lloraban y las trataban bastante mal. Mención aparte para la cara de desprecio de los cartierienses. Y otra para el miedo que dan los policías chinos. No sé si era la intención del documental, pero yo no me compro un Cartier. Que siempre pierden los mismos.


Ayer me salvé por los pelos de tener que hacer la gallina en el patio de mi casa (incluyendo aleteo y rascado de suelo). Ese tiempo invertido en jugar al póquer sirve para algo en el momento menos pensado.


Le hemos regalado a mi madre una chapa que pone "No more dramas". Blanco sobre fondo negro. Esta mañana se puso una camiseta blanca y me pidió la chapa para ponérsela. Y se la puso.



Canción de mi día de hoy: "De tener", Entre Ríos.

sábado, julio 16, 2005

variedades


Mujeres desesperadas ha obtenido quince nominaciones para los Emmy. De las cuatro actrices protagonistas, tres han sido nominadas en la categoría de mejor actriz de comedia. Pienso en la cara de la cuarta cuando llamaron de la productora para dar la noticia. Y en la cara que va a tener que ensayar para la gala. Dura es la vida de las actrices.

Perdidos tiene doce nominaciones, y Arrested development, once. Y me imagino a esos millones de usalandianos en Texas, o en Georgia, o en un pueblo de Utah, o comiendo perritos calientes en un centro comercial en Missouri... y entiendo el concepto "valor relativo".
En otra dimensión, la artista conocida como Mariah Carey, dice que el fracaso de su gran película Glitter se debió a la proximidad de la fecha de su estreno con los atentados de N.Y. Sólo hay que ver imágenes como ésta, ésta, o ésta para darnos cuenta de que tiene razón.
Canción de mi día de hoy: "Gigantic", Pixies.

viernes, julio 15, 2005

son siete

Unas cuantas cosas que me da tiempo hacer en 24 horas:
  • Hacerme un tatuaje.
  • Ir al médico. Ver a mi médico por primera vez. Es una mezcla autóctona de californianopeloblanco al borde de los 65. Me fijo en que tiene un anillo así y uno asá en cada meñique. Me pregunto si es razón suficiente para cambiar de médico.
  • Dormir cinco horas. Madrugar (mucho).
  • Confiar en que Chupiplant cumpla su cometido.
  • Coger un tren. Destino: punto de origen.
  • Pasar la tarde haciendo ejercicios para terminar un curso. Y terminar.
  • Cenar.Tener sueño.

Canción de mi día de hoy: "We love the city", Hefner.

martes, julio 12, 2005

una cosa

  1. Ayer, en el banco, esperando, todo parecía en calma (la mujer que iba delante de mí en la cola llevaba unas sandalias fascinantes, rosas, brillantes, con lazo...) y de repente, oigo en otra ventanilla unas palabras sobrecogedoras: — Ok, McKey— ( que en otras épocas más oscuras se pronunciaba seguido y sin miedo al ridículo: oqueimaquei). Casi se me salieron los tímpanos de las órbitas. Me giré para localizar a la desactualizada y no, no era Leticia. Era una empresaria de unos 45 años. Y eso que al principio me tranquilizó, me fue pareciendo más inquietante a medida que pasaban los minutos en la cola. Es terrorífico que una empresaria dinámica diga oqueimaquei (y en público). Aunque pensándolo despacio, será coherencia.
Canción de mi día de hoy: "Miss Modular", Stereolab.

sábado, julio 09, 2005

de cómo los hombres grises casi me roban el viernes

Nada mejor para un viernes que una reunión trabajil con el ambiente casi sólido de tan tenso.
Madrugón atenuado por un buen presagio: por una vez y no va a servir de precedente, subo la primera al bus. Extraña sensación.
Tren y llego a Villa Chinchilla donde me esperaban algunos besos y caras largas. La reunión fue de todo menos normal. Menos mal que estaba P. que pinta tan poco como yo en cuestiones internas. A las 13 horas nos dicen que nos podemos quedar en nuestro cubículo habitual porque se avecinan escenas desagradables que es mejor mantener fuera del alcance de las niñas. Allí nos quedamos terminando algunas cosas de la sección "documentación, esa amiga" hasta casi las 15 horas.
Los mayores salieron del (pen)último asalto con cara de todo menos de irnos a comer juntos. Que es lo que hicimos, que para eso el restaurante estaba pagado. Y allí fuimos; estuve desarrollando toda una gama de pensamientos alternativos para huir un poco de lo incómoda que era la situación. El sitio estaba muy bien, de diseño pero no demasiado. De esos que te dan ganas de poner Mancini y pedir un martini. Pero no era plan. Subimos al comedor. Momento crucial "dónde me siento" o "quién se sienta al lado del jefe". Solucionado.
Empiezan a desfilar el avituallamiento. Yo he decidido concentrarme en la comida (y bebida) y en charlar con P. Las conversaciones a siete bandas no se me dan bien, me canso y me aburro.
El menú, muy bien: pimientos del piquillo rellenos de marisco (¿cuánto durará esto?), surtido ibérico (menos mal que es socialmente recomendable no hablar con la boca llena), bolitas de queso con almendras (genial estar rodeada de gente a la que no le gusta el queso), habas con jamón ( observo que lo verde no gusta, no tienen ni idea), pido arroz con gambas y atún (huyendo de la carne otra vez) y dejo el plato vacío comiendo metódicamente (me miran con aprobación porque siempre dicen que estoy delgada), llega el postre, mini-porciones de tarta de queso (justicia poética) y otras ( a estas alturas P. y yo tenemos serias dudas sobre si seremos capaces de bajar las escaleras), champán para el brindis (gran momento de tensión) y café. Maratón.
A las 18 horas nos retiramos y los dejamos hablando otra vez de lo mismo (los ratones tenían libertad porque el jefe se había ido ya). Hasta septiembre. La comida, los esfuerzos para soportar sin poner cara de desesperación bromas con verbos tan sutiles e ingeniosos como los que os podéis imaginar, y la euforia no exteriorizada de saber que era el último día me dejaron agotada. Trece horas después de haber salido de casa subí las escaleras como si me hubiese escapado de Alcatraz. Fin de la sección "Laboralia". Hasta septiembre.

Canción de mi día de hoy: "Planes de batalla", Nosoträsh.

jueves, julio 07, 2005

escaleras arriba/escaleras abajo

Escaleras arriba:

  • Que el 12 de agosto se estrene (por fin) Charlie y la fábrica de chocolate.
  • Ésta página. Ilustraciones y más.
  • Flotar en el agua con los oídos tapados. Puede que te miren, pero merece la pena.
  • Illustration Friday. Cada semana proponen un tema para ilustrar. Sin presión.
  • Arrested Development, una serie en la que se dicen frases como: "Prefiero estar muerta en Califonia que viva en Arizona". Y unos personajes... Sábados y domingos en la Fox (16:40).
  • Hacer muñequitos con arena. Hasta ahora mis obras son:"Familia monoparental", "Tortuga", "Pulpo" y "Pirámide".
  • Dormir menos en vacaciones. Si lo que da sueño es el trabajo...


Escaleras abajo:

  • El título Los sexoadictos para A dirty shame, de John Waters. No tiene límites el ingenio de los distribuidores, no.
  • Ésta foto y la noticia que la acompaña. Ella es lo peor.
  • El reggaeton, que es uno uno de los jinetes del apocalipsis. Altamente desagradable.
  • Los Serrano. Igualito que Steve McQueen. Mohínes para todos.
  • Las cosas que hay que oír cuando Madrid queda eliminada en las votaciones olímpicas.
  • Tener una reunión en la cumbre el viernes, cuando ya estoy totalmente desconectada del working world. Tendré que escoger bien al lado de quien me siento, sobre todo en la comida.
  • San Bono y sus apóstoles.

Canción de mi día de hoy: "Claro que sí", Entre Ríos.

martes, julio 05, 2005

ciertas habilidades

En la cocina. Comiendo con mi madre. Voy al salón a coger el teléfono. La tele está puesta. Mi madre oye algo sobre folklóricas y salidas de armario. Diálogo transhabitacional:
- ¿Carmen Sevilla también?
- No sé, no creo.
- Muy torpe la veo yo para eso.
Me río.
Canción de mi día de hoy: "Como un fan", La Casa Azul.

de viaje


Ratonismo.

Desde el sábado, nuestra female-hamster vive en el Gran Parque de Atracciones para pequeños animales domésticos. Éste es mi homenaje, minimal y un poco memo, a mi imagen y semejanza.
Canción de mi día de hoy: "Hombre", M.I.A.

domingo, julio 03, 2005

siete privilegios colaterales

  1. Mi madre trae churros para desayunar, hace café, exprime naranjas, vierte el contenido en un vaso... y es para mí.
  2. Ando la espectacular cifra de cinco minutos y estoy tumbada en un sitio con arena y agua salada: playa.
  3. Me pongo en remojo por primera vez este verano. Un momento sublime que entenderán mejor los acuáticos trasplantados en ciudad sin mar.
  4. Salgo del agua y me doy cuenta de que una persona se ha puesto demasiado cerca de mi toalla. ¿Cómo se respeta tan poco el espacio ajeno? Me acerco más y es mi hermana. Bendita miopía, me dice.
  5. Llega nuestra progenitora y aprovechamos para reírnos de/con nosotras.
  6. Vamos a comer a una terraza y lo único que tenemos que decidir después es si nos vamos a casa o a la playa otra vez. Playa.
  7. Nueve horas después de haberme puesto el biquini, me lo quito para ducharme y me siento como cuando era pequeña y mi madre todavía tenía que ocuparse de que no dejáramos el baño lleno de arena.

Canción de mi día de hoy: "Your new cuckoo", The Cardigans.

viernes, julio 01, 2005

condicionales

Si hubiese cotizado cinco días más (cinco) habría tenido derecho a solicitar algún tipo de prestación de ésas que te hacen la vida más agradable hasta que vuelves al trabajo (sólo para conocedores del best-seller "Vacaciones pagadas, ese mito") pero...
... no habríamos ido a celebrarlo al bar de la esquina, que es una forma como cualquier otra de sacarle un poco la lengua a la realidad.

Si no hubiese entrado hoy en la biblioteca con un caramelo en la boca, habría sido imposible que un caramelo (ése) se me cayera de la misma al suelo (¿cómo? yo fui la primera sorprendida). Ahí estábamos: el brillante, nuevo y color crema suelo de la biblioteca, las personas leyendo revistas y mirando a la que pasa, yo pasando y el caramelo cayéndose al suelo. Un caramelo azul brillante, de éstos que te imaginas que lo anunciaría un oso polar, quedaba tan bien con el color del suelo que hasta me quedé un momento de más mirandolo. Lo recogí y gracias a mi despiste también tardé un momento de más en encontrar la papelera. Imposible escapar de una misma, pero...
... si me quisiera escapar no tendría tiempo para sacar cinco libros (como los días que me han faltado). Éstos:
Q de quién, Sue Grafton; Diccionario de nombres propios, Amélie Nothomb; Los carteles. Su historia y su lenguaje, John Barnicoat;
Mejillones para cenar, Birgit Vanderbeke (encargo de mi hermana); Carson McCullers, Josyane Savigneau (lo he cogido sobre todo por la cara de diminuta de la portada, yo quería una biografía más veraniega).

El otro día estuve hablando en el parque con una mujer. En realidad habló ella. Estaba con sus dos perros y me contó muchas cosas tristes y difíciles de su vida. Me fijé en que tenía las uñas de los pies pintadas de morado. Me dijo que tenía cincuenta años y que ya prefería viajar con los documentales. Cuando llegaron sus hijos me despedí. Esta mañana en la parada del autobús casi todo el mundo llevaba sandalias (o similares) y pensé en lo feas que son casi todas (para un reportaje fotográfico), y me acordé de las uñas moradas. Me pregunto en qué pensará ella mientras se las pinta.

Canción de mi día de hoy: "Fleur de lys", Juliana Hatfield.