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...tal como han hecho desde tiempos inmemoriales los jóvenes sometidos a presión, decidieron tumbarse un rato y perder el tiempo.

miércoles, julio 11, 2007

pantalla partida

El lunes vi que ponían Cuando los mundos chocan, y me di un aviso para acordarme y descubrir qué sentía al verla en la tele, a una hora estrella, con su doblaje tan acogedor, y sus trajes de ir al espacio tan inocentes. Y sentí una punzada de satisfacción cuando la tuve delante, casi como si la hubiese programado yo. Después pensé en que igual alguien la descubría esa noche, y aunque no supiera bien de qué iba, soltaba el mando hipnotizado por las voces, los trajes, las frases, y la ausencia de pretensiones. Tendría que ser alguien que no estuviera esperando explosiones brillantes ni hologramas, alguien que cuando llega el final fuera capaz de apreciar el colorido bíblico del decorado. Con esa imagen en la cabeza, varias casas, cada una con su televisor, cada una con su espectador, con su sofá, con su decorado, absortos o incrédulos esperando ver quienes consiguen subir al cohete salvador y quienes no, volví hacia atras usando el mando sin prisa. Y con cierta sensación de trabajo terminado.

5 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Dí que sí. Donde se pongan esas maquetas de cartón piedra de antes, que se quiten los efectos especiales de millones de dólares. Si no fíjate en los dos Titanic. Ni comparación.

11 julio, 2007 19:35

 
Blogger El Malvado Ming said...

Esa misma sensación la tuve hace un par de noches a las dos de la mañana. Fue leer "Directed by Robert Siodmak" en letra hipergótica y oir esas fanfarrias en mono, y saber que iba a pasarme dos horas arrullada por las voces familiares de los gansters de los cuarenta con sus gabardinas perfectamente ceñidas y sus muertes espasmódicas con disparos que suenan a perdigón.

12 julio, 2007 10:21

 
Blogger Mrs. Sarmiento said...

Pues mira, yo qué sé; yo no soy fan de la serie B (ni de la de ahora ni de la de antes), ni de la ciencia ficción, ni de las pelis espaciales siquiera. Pero de lo que sí lo soy es de ese entusiasmo totalmente arrollador capaz de convertirme a lo que sea en menos que canta un gallo. A mí me pasa con lo mío también...
Pesadez lo llaman algunos. Yo lo llamo generosidad.

12 julio, 2007 13:45

 
Blogger nadadora said...

ohnenick: a mí también me gustan los efectos especiales de ahora, pero el encanto... Titanic no la he visto, ahí queda eso.

manga ranglán: sé de lo que hablas. Si fuera un reproductor, podría emitir esos sonidos con sólo pensar en ellos.

mrs. sarmiento: de eso de lo que se trata, del entusiasmo, para salvarnos está. Claro que sí. Y de pesadez nada.

13 julio, 2007 13:12

 
Anonymous Anónimo said...

another said...

but what is that? better, who are you? that have so many followers

24 agosto, 2007 13:03

 

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